17 de diciembre de 2015

Aislada

De un tiempo a esta parte he reducido mi mundo. Me importa más la parte colectiva que la individual, y mis luchas van encaminadas al bien común por encima del personal.
Todo es muy bonito, pero hablando egoistamente no se hasta que punto me compensa. Mis compañeras de lucha son solo eso, compañeras de lucha. Mis antiguas amigas cada vez son más antiguas que amigas.


Y ahora, como diría Lenin, ¿que hacer?